Un equipo del laboratorio de robótica TAR-Lab de la Pontificia Universidad Católica, en colaboración con la empresa SuperTrash, presentó un robot agrícola que promete cambiar la forma en que se controla la maleza en los cultivos chilenos y del mundo.
El prototipo, cuyo diseño y movimientos recuerdan al querido personaje animado Wall-E, fue creado para identificar y remover malezas de forma autónoma, sin necesidad de aplicar pesticidas ni herbicidas. Una innovación que apunta directo a uno de los grandes desafíos de la agricultura moderna.
“El control de malezas es un problema serio en la agricultura chilena y global, por sus efectos negativos en los cultivos, el uso excesivo de herbicidas y el impacto ambiental que eso genera”, explicó Tito Arévalo, profesor de Ingeniería Mecánica y Metalúrgica UC y líder del proyecto.
Además de automatizar el trabajo, este robot representa un avance hacia una agricultura más limpia y sostenible, reduciendo la dependencia de químicos y ayudando a cuidar los suelos, la salud de los trabajadores y el medioambiente.
Una apuesta tecnológica hecha en Chile, que demuestra que la innovación y el cuidado del planeta pueden ir de la mano.