El Zoológico de Quilpué anunció con alegría el nacimiento de un cóndor andino (Vultur gryphus), una especie que se encuentra en estado vulnerable de conservación. Sus padres, que viven en el recinto desde hace más de 20 años tras ser rescatados con lesiones que les impiden volar, lograron empollar exitosamente un huevo en octubre de 2024.
“El pichón está sano, no necesita medicamentos y actualmente está siendo monitoreado con chequeos visuales de salud. Se encuentra aislado, pero acompañado por sus padres”, explicó Patricio Ruz, director del zoológico.
Según detalló, ambos cóndores participan activamente en el cuidado del nuevo integrante de la familia, alimentándolo y protegiéndolo. Este proceso se extiende entre 12 y 18 meses, aunque el pichón comienza a explorar fuera del nido a partir de los 6 meses.
La meta de los expertos es ambiciosa y esperanzadora: si todo marcha bien, el cóndor podría ser liberado en 2026 en su hábitat natural, en la cordillera, acompañado por una bandada y con seguimiento del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), como parte de un proceso de reinserción.