Santiago Wanderers corrigió su informe financiero 2024 y reveló que el déficit real es de $239 millones, una cifra muy inferior a los más de $1.500 millones reportados inicialmente. La diferencia se debe a que en un primer momento no se habían considerado los ingresos por la venta del jugador Lucas Cepeda.
El nuevo informe fue enviado este jueves a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), y aunque la reducción del déficit es significativa, el panorama económico del club sigue siendo delicado. Desde su conversión en sociedad anónima en 2007, Wanderers solo ha tenido tres temporadas con cifras azules: 2013, 2018 y 2021. Las pérdidas acumuladas desde entonces superan los $10.900 millones.
Alejandro Torres Mussato, académico de la Universidad de Valparaíso y experto en finanzas deportivas, explica que el problema de fondo es estructural: “Wanderers tiene un patrimonio cercano a los 11 mil millones de pesos, pero las pérdidas acumuladas casi igualan ese monto. En cualquier otra empresa sin ingresos asegurados, eso sería insostenible”.
El único respiro del club —y de muchos otros en el fútbol chileno— sigue siendo el dinero que reciben por derechos de transmisión, en este caso, los pagos provenientes de TNT Sports. Para muchos, esa es la delgada línea que separa la continuidad del colapso.