Muchas personas con sobrepeso sufren molestias o dolor en las rodillas, y no es casualidad. Estas articulaciones, que soportan gran parte del peso del cuerpo, pueden verse muy afectadas por el exceso de carga. La buena noticia es que incluso una baja de peso moderada puede hacer una gran diferencia.
Un estudio realizado por la Universidad de Wake Forest, en Estados Unidos, entregó un dato muy potente: por cada kilo que una persona pierde, se reducen cerca de cuatro kilos de presión sobre cada rodilla con cada paso. Es decir, bajar solo cinco kilos equivale a liberar toneladas de peso acumulado en estas articulaciones a lo largo del día.
La investigación se llevó a cabo durante 18 meses y se enfocó en personas mayores con sobrepeso y problemas en las rodillas. Los resultados fueron claros: quienes bajaron de peso no solo sintieron menos dolor, sino que también mejoraron su movilidad y calidad de vida. Además, se observó una disminución en el desgaste del cartílago, lo que podría ayudar a prevenir o frenar el avance de enfermedades como la artrosis.
Es importante destacar que no se trata de hacer dietas extremas ni perder grandes cantidades de peso de un día para otro. Al contrario, incluso cambios pequeños y sostenidos pueden tener un impacto positivo en la salud de las articulaciones.
Si vives con dolor o rigidez al caminar, subir escaleras o estar de pie mucho tiempo, considera que perder algunos kilos de forma saludable y acompañada, si es posible podría ser un primer paso hacia una vida con menos molestias y más movimiento.