Un equipo de estudiantes y docentes del Instituto Profesional Santo Tomás, sede San Joaquín, desarrolló un innovador material llamado Insuflex: un aislante térmico, acústico, ignífugo y sustentable, elaborado a partir del reciclaje de envases de cartón para bebidas.
La propuesta nace desde un enfoque interdisciplinario, uniendo las áreas de Comunicación e Ingeniería, con el objetivo de generar soluciones reales para el medio ambiente y el mundo de la construcción. El material no solo busca reducir la huella ecológica, sino también ofrecer una alternativa eficaz y de bajo costo para edificaciones que requieren aislamiento de temperatura y sonido.
Este proyecto ya despierta interés por su proyección internacional y su potencial para aportar a la economía circular.
Desde las aulas, este grupo demuestra que la innovación también puede venir desde la conciencia ecológica y el trabajo en equipo.