La pasión por los números y el razonamiento lógico se tomó la Región de Valparaíso este fin de semana, cuando 312 estudiantes de 14 comunas se dieron cita en la Olimpiada Nacional de Matemática, un certamen que ya se ha convertido en una tradición educativa en el país. La actividad fue organizada por la Sociedad de Matemática de Chile (SOMACHI) y en la región contó con la coordinación de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), a través de su Instituto de Matemáticas (IMA).
En su versión número 37, la competencia reunió a escolares de establecimientos de Valparaíso, Viña del Mar, Villa Alemana, Santo Domingo, San Felipe, San Antonio, Quilpué, Quillota, Los Andes, Llay-Llay, Limache, La Calera, Curauma y Concón, quienes midieron sus conocimientos y habilidades en torno al pensamiento matemático.
El objetivo fue seleccionar a los mejores talentos que representarán a la región en la fase final nacional, programada entre el 5 y el 8 de noviembre en Santiago.
Un récord de participación
Radu Saghin, académico del Instituto de Matemáticas de la PUCV y encargado regional del evento, valoró la masiva convocatoria:
“Este año tuvimos una participación histórica, casi doblamos el número de alumnos y alumnas respecto al año pasado, por lo que tuvimos que cambiar la locación. Estamos muy contentos de ver el interés de los estudiantes de los colegios de la región por la matemática. También estamos muy agradecidos a los 14 ayudantes de las carreras de pregrado en matemática del IMA PUCV que colaboraron en la organización”, señaló.
La motivación de los estudiantes
Durante la jornada, los escolares rindieron una prueba diseñada para poner a prueba su razonamiento lógico-matemático. Más allá de la dificultad del certamen, muchos destacaron la oportunidad de compartir con otros jóvenes que comparten su interés por esta disciplina.
Agustín Álvarez, estudiante de 1º medio del Saint Paul’s School de Viña del Mar, comentó:
“Vine para tener experiencia y ver si puedo competir en otras competencias matemáticas para avanzar y aprender más. También me entusiasma llegar a la final de Santiago”.
Desde Quillota, Alison Silva, alumna de 4º medio del Colegio Francisco de Miranda, agregó:
“A mí me gustan mucho las matemáticas y cuando la profesora me habló de esta iniciativa, pensé en venir y ser parte del desafío. Me pareció súper bueno para ganar experiencia y desarrollar mis habilidades matemáticas”.
En tanto, Cristopher Sánchez, profesor de Matemática del Sunnyland School de San Felipe, destacó el valor formativo de la experiencia:
“Esta es nuestra primera vez en la competencia y estamos muy entusiasmados por vivir la experiencia. La idea es plantearse la olimpiada como un desafío, donde los estudiantes pueden interactuar con jóvenes de otros lugares y conocer otros ámbitos de la matemática”.
Camino a la final
Con el entusiasmo de haber superado una etapa regional de alto nivel, ahora los seleccionados se prepararán para representar a la región en Santiago, donde se definirá a los ganadores de esta edición.
La Olimpiada Nacional de Matemática se ha consolidado como una plataforma para estimular el talento, la creatividad y el pensamiento crítico en torno a esta disciplina, abriendo puertas a futuras generaciones de científicos, ingenieros y profesionales que ven en los números no solo una materia, sino una verdadera pasión.