El parlamentario enfrenta crecientes críticas debido a un extenso historial en la difusión de noticias falsas, una práctica que, según sus detractores, utiliza desde hace años para denostar a sus adversarios políticos.
Incluso el Presidente Gabriel Boric ha debido salir públicamente a desmentirlo, como ocurrió cuando el legislador compartió una imagen generada con inteligencia artificial en la que aparecía abrazando al político venezolano Diosdado Cabello.
A esto se suman declaraciones homofóbicas emitidas en contra de colegas y ministros, las cuales han sido ampliamente cuestionadas tanto dentro como fuera del Congreso. Asimismo, el diputado ha sido denunciado por incumplir el reglamento interno de la Cámara, tras contratar a una amiga en funciones parlamentarias, lo que abrió un nuevo flanco de críticas sobre el uso de recursos públicos.
En medio de estas controversias, sectores políticos y sociales han insistido en la necesidad de reforzar los mecanismos de fiscalización y sanción dentro del Congreso, con el fin de resguardar la probidad y el respeto en el ejercicio de la función pública.