Un hombre de 37 años quedó con la medida cautelar de arraigo nacional, tras ser formalizado por el delito reiterado y consumado de captación y grabación de registros audiovisuales de partes íntimas en Quilpué, Región de Valparaíso.
El imputado, que se desempeñaba en una sucursal de la juguetería Ansaldo, fue sorprendido en septiembre de 2024 fotografiando sin consentimiento a una mujer adulta en un centro comercial. A raíz de la denuncia, la Fiscalía Local de Quilpué ordenó diligencias a la Brigada del Cibercrimen de la PDI, que realizó un peritaje forense al celular del acusado.
En el dispositivo se encontraron más de tres mil imágenes de carácter pornográfico, entre ellas 800 fotografías y 360 videos sexuales, además de 1.868 registros obtenidos en espacios públicos, muchos dirigidos a mujeres, adolescentes y niñas entre 7 y 10 años de edad.
La subprefecta Yasmín Cárdenas, jefa de la Brigada del Cibercrimen, confirmó el hallazgo y destacó la magnitud del material incautado.
El fiscal Walter Wenzel, en tanto, precisó que el imputado habría registrado en al menos cuatro ocasiones a una víctima adulta mientras trabajaba en Ansaldo, captando imágenes de sus partes íntimas sin su consentimiento, lo que fue advertido por la propia afectada y su pareja.
El tribunal decretó un plazo de 100 días para la investigación, en el que se continuará reuniendo antecedentes y determinando la existencia de más víctimas.