Un total de 40 mil personas participaron en el simulacro de sismo y tsunami que se llevó a cabo en Viña del Mar, organizado con el objetivo de reforzar la preparación de la comunidad ante emergencias catastróficas.
La alcaldesa de la comuna, Macarena Ripamonti, calificó el ejercicio como un éxito y destacó la conducta de los participantes:
“La manera de cuidar nuestra seguridad física e integridad y, finalmente, la vida, que es el bien más preciado que tenemos como sociedad, es previniendo, poniéndonos en el caso de que exista una emergencia catastrófica y que tengamos que ponernos en un espacio de seguridad”, afirmó.
Ripamonti enfatizó que, ante una emergencia real, la evacuación debe realizarse a pie para evitar congestiones vehiculares:
“El primer lema de una evacuación es que nunca lo puedes hacer en vehículo. Hoy, la hipótesis que simulamos fue un terremoto de 8.0 con las consecuencias que eso significa, como rotura de pavimentos, caída de equipamiento, rotura de líneas de alta tensión, y por lo tanto la inseguridad en la electrificación de los espacios, sumado a un tiempo acotado de escape, por tanto, las evacuaciones son siempre a pie”, señaló.
Durante el simulacro, se habilitaron como puntos de encuentro la Quinta Vergara, el Polideportivo y el Estadio Sausalito, con el objetivo de asegurar la coordinación y protección de la población ante un eventual evento de gran magnitud.